Diana...

La vida va y viene...cuando se va deja mucho dolor en el camino de los que se quedan atrás...sus amigos son los ángeles que Dios le ha puesto en la tierra para caminar junto a ella en sus distintas etapas y esta vez decidio llevarse a uno para que estuviera junto a El en aquel lugar donde el dolor no existe....muchos sueños compartidos quedan en las paredes de aquel ataúd frío que lleva mil lágrimas de quienes la quisieron tanto, lo único que no se puede llevar es su sonrisa tan hermosa y limpia, su alma y el amor que todos tuvieron por ella...Celeste ha quedado muy abatida por la noticia de su ausencia pero sabe que su pequeño ángel ha dejado este mundo de sufrimiento para ir al lado del Único Ser que era capaz de salvarla de este lugar de llanto...una amiga le sugirió que convierta el dolor en valor, y así toca seguir en esta vida recordando a los que hemos amado y se van, recordando a todos aquellos que se adelantaron a salir de aquí y que nos preparan el camino para que entendamos que todo es tan real que puede dejar de existir en cualquier momento..."descansa en paz mi niña"....solo eso podía pensar, solo eso podía sentir...descansar en paz es lo que podía hacer ahora aquella amiga que se había ido....descansar de tanto ruido de este mundo que a todos golpea..."te quiero mucho, ya nos volveremos a ver...en mi corazón siempre vas a ocupar un lugar especial"...por el momento la extrañará, hasta que se vuelvan a ver allá en el lugar donde el dolor no existe...

Empezó otro año con nuevas ilusiones y proyectos...estaba contenta por todo lo que se venía pero también sentía un poco de dolor al tener que dejar el lugar donde sus sueños nacieron para ir a abrirse paso en el camino hacia la realizacion de los mismos...se fue y no deja de extrañar todavía el aroma de su hogar, las risas y gritos de su familia que, aunque solo soportaba por corto tiempo, eran parte de su medicina diaria...cambió de ciudad y de perspectiva, dejó atrás muchos muertos que así debieron quedar...dejó mucho amor botado por las esquinas y muchos amigos a los que extraña día a día...

El abrazo fraterno y la sonrisa al llegar al hogar que había convertido en su segunda casa, eran unas de las cosas que más extrañaba...la comida de mamá, preparada a veces al apuro pero siempre con cariño...el reclamo de papá por no visitarlo muy seguido porque vivía inmersa en su trabajo...el silencio del hogar que sí sentía suyo...aquel río de sus amores, esa vista maravillosa y relajante acompañada del perfecto sonido que el viento y la corriente le obligan a hacer al agua...las luces imparables de su ciudad que nunca duerme...y ver su sonrisa todos los días...

Cada vez que se despedía de él sentía que lo perdía nuevamente (aunque la pérdida era relativa ya que nunca había sido suyo) y cada vez que se volvían a encontrar su corazón sonreía porque siempre encontraba en sus ojos la respuesta a sus anhelos de amarlo...la paciencia ha sido una virtud que ha aprendido a cultivar y que con el tiempo ha adquirido...ella busca seguir formando parte de su realidad y de la mano ayudarlo a caminar por el camino de sus sueños, sea cual fuere el final...ella quería estar ahí, sin esperar nada y dando mucho, amando cada uno de sus defectos y recordando que por sus virtudes es que lo mira con su corazón, caminando a su lado sabiendo que su alma va de la mano con la de él aunque realmente estén tan lejos...una mirada basta y vuelve a suspirar, un abrazo y pum! la perdimos...a él no lo deja partir, más bien lo aferra a su vida...caminará con él sea cual sea el final de su historia, esperando que al caminar, sus sueños se junten y se hagan solo uno...